Desde el inicio de su carrera, Davy Tissot está acostumbrado a la excelencia. Este chef lionés ha trabajado con los grandes nombres de la gastronomía francesa, como Régis Marcon, Jacques Maximin y, por supuesto, Paul Bocuse.

En 2004, se propusó ganar el concurso Meilleur Ouvrier de France. Y con sólo 30 años, se convirtió en uno de los cocineros más jóvenes en obtener este título, dentro de una clase excepcional ese año.

Con la bandera tricolor de Francia en el cuello de su uniforme, es la medalla que distingue a los MOF (Mejores Obrero de Francia), Davy Tissot sigue brillando en Lyon. De 2004 à 2016, dirigió las cocinas del restaurante Villa Florentine, galardonado con una estrella Michelin, antes de asumir la dirección del Instituto Paul Bocuse.

El Bocuse d’Or es uno de los concursos gastronómicos más prestigiosos del mundo, creado en 1987 por Paul Bocuse en Lyon. Veinticuatro chefs de todo el mundo son seleccionados para competir durante más de cinco horas ante el público y el jurado. Francia no ha ganado este evento desde 2013, cuando el chef Thibaut Ruggeri se llevó el premio.

Para llegar a la final de este año, Davy Tissot ganó el Bocuse d’Or de Francia en 2019, antes de conseguir el sexto puesto en el concurso europeo de Tallin (Estonia), que le dio el billete para la final de Sirha. Acompañado por su ayudante de cocina Arthur Debray, en esta ocasión ganó la categoría de «mejor plato» «Realmente vuelve a casa», dijó emocionado el chef francés Davy Tissot, mientras levantaba el Bocuse de Oro, una especie de copa del mundo de la gastronomía, marcada este año por el contexto sanitario.

Fuente:     Gastronomie ,BFMTV